Las estufas de piel podrían dejar de ser la opción más económica.
¡Descubre cómo puedes ahorrar con nuevos sistemas!
Sistemas modernos de calefacción: La mejor opción para el ahorro
Entre el 15 de octubre y el 1 de diciembre, los italianos pueden encender los radiadores. Sin embargo, los últimos años han traído innovaciones significativas para ahorrar energía. A pesar del clima templado de Italia durante todo el año, existen nuevas maneras de ahorrar.
Calderas de condensación: La revolución del calentamiento
Entre los métodos más modernos se encuentran las calderas de condensación. Los modelos más recientes consiguen calentar rápidamente los espacios, logrando un enorme ahorro energético.
Las ventajas de las calderas murales de condensación
Las calderas murales de condensación permiten calentar agua con menor coste. Aprovechan el calor térmico latente, es decir, la energía necesaria para cambiar el estado de una sustancia sin modificar su temperatura. En este caso, utilizan el calor latente de los gases de escape.
Cuando una caldera funciona, la combustión del gas produce calor y vapor de agua. En una caldera tradicional, estos gases alcanzan unos 100 °C y se expulsan sin ser utilizados.
Las calderas de condensación recuperan el calor latente del vapor de agua en los gases. Al enfriar los gases por debajo de la temperatura de condensación (alrededor de 56 °C para el gas metano), el vapor de agua se condensa, liberando el calor latente.
Instalación y beneficios fiscales de las calderas de condensación
Instalar una caldera de condensación mural resulta sencillo. Si decides sustituir una caldera estándar, puedes aprovechar la deducción del 65%. No obstante, es crucial considerar el tipo de combustible disponible: los beneficios son mayores si se utiliza gas metano como combustible.
En cuanto a los costes, una caldera normal cuesta entre 500€ y 1000€. En cambio, las calderas de condensación tienen precios más altos, oscilando entre 1000€ y 2100€. Aun así, al reemplazar una caldera antigua, puedes aprovechar una deducción fiscal del 50%. Esta deducción puede llegar hasta el 65% si se trata de una rehab.comación energética. En este caso, también se instalan válvulas termostáticas.
Las válvulas termostáticas: Un complemento ideal para el ahorro
Las válvulas termostáticas son dispositivos instalados en los radiadores. Permiten regular automáticamente el flujo de agua caliente según la temperatura deseada en una habitación. Cuando la temperatura ambiente alcanza el nivel deseado, la válvula reduce o bloquea el flujo de agua al radiador, evitando el sobrecalentamiento y reduciendo los picos de consumo.
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