Frescos y orgánicos: Helados caseros únicos (más allá de la fruta) – ¡Descubre la idea original!

¿Deseas algo refrescante y dulce al mismo tiempo? Prueba estos helados caseros: la opción perfecta para todo el verano.

El verano ya llegó a su máximo esplendor: estamos en agosto, el mes dedicado a las vacaciones, al descanso y al disfrute. Es el momento perfecto para desconectar y relajarte. Además de buscar destinos maravillosos para disfrutar del mar o la montaña con buena compañía, también es la época ideal para probar comida local, fresca y sabrosa.

Para combatir el calor veraniego, nada mejor que un delicioso helado casero. Olvídate de los helados industriales. Opta por opciones naturales y económicas, hechos en casa. ¿Quieres saber cómo prepararlos? Te lo contamos a continuación.

Helados caseros: una idea original que te sorprenderá

Cuando llega el verano y las temperaturas suben, nuestro cuerpo pide bebidas y comidas frescas. Por eso, nuestras dietas cambian a platos ligeros y frescos, perfectos para la playa o la casa, sin necesidad de encender la cocina.

Uno de los postres más amados es el helado. Además de delicioso, es refrescante y no lleva tanto azúcar como un helado tradicional. Prepararlos en casa es muy fácil. Aquí te dejamos varias recetas para crear helados de diferentes sabores: ¡irresistibles!

Aquí te dejamos algunas variantes que puedes hacer en casa:

• Fruta. La opción más popular es la de frutas. Refrescante, hidratante y llena de vitaminas. Para prepararlos, tritura la fruta elegida y mézclala con un poco de agua o jugo si está muy espesa. Luego llena los moldes de helado y ponlos en el congelador por unas 6 horas. Listo, disfruta de ellos.
• Verdura. Sí, también hay quienes prefieren helados de verdura. Aunque suene raro, son refrescantes y saludables. Para hacerlos, tritura la verdura de temporada, mézclala con yogur griego, añade un poco de edulcorante y congélalos. ¡El resultado te sorprenderá!
• Helados dulces. No hay una receta específica, puedes poner los ingredientes dulces que tengas en casa. Por ejemplo, yogur y chocolate, crema de leche, copos de avena o chispas de chocolate. Coloca la mezcla en los moldes y congélala. ¡También deliciosos!